domingo, 14 de octubre de 2007

Perspectiva

No soy una persona religiosa, pero ayer tuve que ir a misa.
Mis papás son algo conservadores y no iban a aceptar un no de mi parte.
Fue completamente diferente. No había ido desde que decidí que la iglesia era manejada como un negocio, y preferí vivir mi fe como yo consideraba prudente y no como el church business me exigía.

Miraba a todos repetir de memoria lo que desde chicos aprendieron, sin que en la mayoría de sus caras se viera algún rasgo de convencimiento o devoción. Oí una de las 5 o 6 lecturas que siempre usan en las bodas. Observé al padre dar la omilía, y esto, porque el micrófono, su acento español y voz ronca hacían imposible entenderlo, pero extrañamente todos acentían cuando acababa una frase. Me levanté y senté repetidas veces siguiendo las órdenes del sacerdote. Vi a la gente desfilar por el corredor central en el camino a la comunión con mirada perdida y cara seria.
Al final simplemente me persiné y me sonreí a mi misma; todo había reafirmado mi decisión con respecto a la religión.

La gente aplaudía. Los novios iban caminando rumbo a la salida de la iglesia. Al pasar frente a mi, pude ver sus caras.
Para ellos, todo el ritual anterior hacía completo sentido.
Y les empecé a aplaudir.

5 comentarios:

phe dijo...

Mi papá odia que aplaudan en las misas... a mi tampoco me hace muy feliz, pero bueno me gusto tu descripción, me hizo recordar ese lejano lugar donde se realizan ritos que ya no comprendo y que cuestiono cuando tengo que asistir.

Lo de la mirada perdida y seria atrapa bien la situación y sin embargo le diste al clavo, para los novios ES el momento, dime no viste la cara de los de la primera fila?? jajaja

cuando nos organizamos... quiero trabajar en un proyecto!!!

@nf!L!N dijo...

Es bien divertido observar a la gente cuando asiste a la iglesia. Es como voltearte tu mirada hacia atras en el cine y ver las expresiones de la gente cuando se asusta o se emociona.

Mariana dijo...

Creo que la última misa a la que fui fue a la de mi graduación de la prepa.
Pero tal vez no eres tan cínica como pretendas, jejeje.

nilla dijo...

tienes razon, pues deberias de ir a meditaciones budistas , nada que ver con occidente, otro pedo!!!!recomendadisimas!!

Fantasía dijo...

Ay Pau, estoy completamente de acuerdo con que la Iglesia se maneja como un negocio. Yo también decidí vivir la religión a mi modo, y creo que después de tantos años en escuela de monjas, sólo me queda decir que me volví muy poco creyente.

Hay tantas cosas con las que no concuerdo, tantas contradicciones... creo en mí, así no culpo a nadie de mis males y cuando las cosas salen bien es gracias a mi esfuerzo.